bird 5394906 1920

Hola una vez más:

Ya ha pasado un año, dos meses y escasos días desde que no entiendo nada. No entiendo qué pasó, no entiendo qué hice. No sé qué fue lo que lo rompió todo. No sé por qué actuaste así tú ni porqué lo hice yo, pero así fue. Y así somos. 

Como si nunca nos hubiésemos querido. Como si nunca nos hubiésemos mirado a los ojos pensando en la vida que queríamos juntos. Como si nunca hubiese tenido claro que eras el amor de mi vida. Fueron años, besos y tormentos. Separados, juntos, nuestros labios, los de otros. Qué más da. La cuestión es que aquí sigo. Preguntándome todos los días qué será de ti. Si aún dormirás en ese cuarto desordenado, si aún tendrás ese lunar de la espalda que tanto te acompleja, si aún me recordarás como yo lo hago. Existe la posibilidad de que no sea de ese modo, que estés totalmente feliz con tu vida actual, que no me quieran más e incluso que pienses que todo lo que vivimos fue una ilusión y no era amor de verdad. De ser así, sigue con tu vida, no quiero nada más en el mundo que tu propia felicidad. 

Pero de no ser así, de seguir pensando en mí y sin saber el porqué, de no ser capaz de imaginarme en un altar con otro sin llorar, si no puedes andar por la calle sin pensar en si nos encontramos, entonces ven. Estaré aquí siempre. Me da igual lo que hayamos peleado, el daño que nos hayamos hecho o haber dudado. Como el primer amor no hay ninguno y lo nuestro, aparte de ser el primero, era cierto.

Intenta negarlo si puedes, dilo mirándote en un espejo y miéntete. Pero no conseguirás nada más que alejarte de tu verdadero lugar. El amor puede con todo, tú y yo lo hemos demostrado mil veces. Y sí, es evidente que ambos hemos vuelto a amar a otras personas, ser felices e incluso enamorarnos. Pero dime que la sientes así. Dímelo. Dime que tienes esa convicción de que quieres pasar con ella todo el tiempo de tu vida. Dime que la amas y harías por ella todo lo que hiciste por mí. Yo tengo clara mi respuesta y por eso vengo, no sé por qué no te quitas la armadura y aceptas la derrota como un campeón. Lo intentaste y no pudiste, obviar este amor sería ser infiel a tu corazón. 

No puedo garantizarte un amor perfecto, ni que seamos la pareja que fuimos, no puedo quizás darte la estabilidad que ella te da, pero te juro que amor… amor en mí habrá siempre para ti, de todas las formas y de todos los colores porque este amor no lo tiene cualquiera por cualquiera. Lo tengo yo por ti, y aquí te espero. No tiene que ser hoy, ni tampoco en un año, me da igual. Pero será, estoy segura, y mientras no sea, aquí seguiré esperándote. 

Te quiero, pero ante todo, sé muy feliz. Aunque me veas en otros brazos o viviendo nuestros sueños con otros ojos y no con tu cielo, seguiré buscándote entre todas las miradas y sacrificándolo todo por un minuto a tu vera. Cuando dije que esto era para siempre, lo supe. Ahora no puedo engañarme. Ojalá tú tampoco. 

Muchos besos.


Deja una respuesta

  Acepto la política de privacidad